Líderes internacionales de medios de comunicación señalaron su profunda preocupación por los persistentes ataques del gobierno estadounidense a la prensa al pedir al presidente  Donald Trump que cese sus acusaciones de «falsificación informativa»  y su discriminación contra ciertos medios. Una carta enviada a la administración estadounidense rechaza firmemente la reiterada acusación del presidente Trump que califica a los medios de comunicación como «enemigos del pueblo estadounidense».

Más de 40 editores en jefe, directores ejecutivos y presidentes de  medios y organizaciones que los nuclean alrededor del planeta firmaron la carta dirigida a Trump. Entre ellos se encuentran Tomas Brunegård (Suecia), presidente de WAN-IFRA; Marcelo Rech (Brasil), presidente del Foro Mundial de Editores;  Michael Golden (Estados Unidos), vicepresidente de The New York Times; Daniel Dessein (Argentina), presidente de Adepa y vicepresidente regional de la Sociedad Interamericana de Prensa; Valdo Lehari Jr. (Alemania), vicepresidente de la Asociación europea de diarios; junto a directivos de medios de otros 20 países.

«Es contraproducente ver al Presidente de los Estados Unidos alimentando un antagonismo contra los medios de comunicación al etiquetarlos -engañosamente- como ´noticias falsas´», dice la carta destinada a Trump. «Tememos que el clima general para la libertad de los medios de comunicación que actualmente está promoviendo su presidencia, ponga seriamente en peligro la capacidad continua de una prensa libre para que el poder rinda cuentas en los Estados Unidos».

El texto, coordinado por  el Comité Ejecutivo de WAN-IFRA, del que Adepa forma parte, resalta el daño que los comentarios del presidente en la plataforma Twitter está generando a una industria que trata de responder al fenómeno de la desinformación y las «noticias falsas».

El documento remarca la histórica relación de los Estados Unidos con una prensa libre, para subrayar cómo las acciones del actual presidente paradójicamente hoy inspiran a líderes en países con libertades debilitadas para reprimir o sofocar derechos esenciales.

«En un momento en que los periodistas y los medios de comunicación son crecientemente blanco de represalias violentas (y, en muchos casos, a menudo mortales como resultado del trabajo que hacen), el tono de sus comentarios es altamente inflamable», apunta la carta. «En un país profundamente dividido, un país que enfrenta muchos desafíos en numerosos frentes, la necesidad de una prensa crítica, que actúe como guardián de las libertades esenciales, parece más urgente que nunca».

WAN-IFRA, entidad que agrupa a 18.000 medios a nivel global, propone en la misiva un encuentro entre la administración norteamericana y representantes de los medios globales para discutir posibles caminos para reconstruir la deteriorada relación.

 

La carta completa en inglés, puede leerse aquí: http://www.wan-ifra.org/node/170915/