Por Diego Dillenberger

Mathias Döpfner, el CEO de la editorial Axel Springer, el mayor editor de periódicos de Alemania (Bild, Die Welt, Politico), lleva la voz cantante de las editoriales alemanas en el reclamo al Parlamento Europeo de una ley de derechos para las editoriales que vaya más allá del mero derecho de autor y lleve ingresos a esos diarios.

Este miércoles el Parlamento Europeo podría votar en su segundo intento una ley que rija sobre Europa y exija a los portales y redes sociales que paguen por compartir contenido generado por los diarios o lleguen a un acuerdo sobre sobre sus derechos.

Döpfner es también presidente de la “ADEPA alemana” BDZV.

La iniciativa europea busca reequilibrar la balanza económica entre los grandes portales, que absorben el grueso de la publicidad sin invertir en contenidos, y los medios, que invierten en generar contenido y ven cómo la publicidad digital fluye a los portales y redes sociales y buscadores, como Google y Facebook, haciendo su modelo de negocios cada vez más difícil de sostener.

En una entrevista con el portal especializado Meedia, Döpfner explicó que “no se trata de llevar inicialmente grandes cantidades de dinero a las arcas de las editoriales, sino de establecer  el principio no solo del derecho de autor, sino, como en la industria de la música, el del aporte de la editorial, que lo hace posible. Sin la Gema (la SADAIC alemana) no existiría la industria de la música”.

Döpfner explicó que esa legislación no hacía falta antes, porque “a nadie se le ocurría ponerse a fotocopiar un diario para revenderlo. No hubiese sido rentable. Hoy el copy-paste es la base de un enorme modelo de negocios”.

El presidente de la asociación de editores de periódicos de Alemania explicó que “toda la discusión en torno a los snippets, que no se podrían linkear en el futuro y así se censuraría Internet es un falso dilema y un intento de desviar el debate”.

El llamado Upload filter es una prohibición adicional para subir a la web o redes sociales contenido que puede estar identificado con medios que generó la mayor controversia y permitió que los opositores a la iniciativa, con Google y Facebook a la cabeza, pudieran apelar a los diputados de ultraderecha para bloquearla en el primer intento, en julio.

Esa restricción podría desaparecer en un nuevo intento por aprobarla con más consenso.

Agregó Döpfner que sin un derecho amplio para las editoriales sobre su contenido, las condiciones laborales del periodismo empeorarán, en referencia a que muchos periodistas se expresaron en contra del derecho ampliado para editoriales.

Sobre el método para cobrar los derechos, Döpfner no tomó posición y dejó abierto el debate si debiera crearse una sociedad que represente a las editoriales o si cada editorial debe organizar la cobranza por su lado.

El miércoles votaría el Parlamento Europeo “desatando” el paquete de derechos de la ley para votar artículo por artículo, teniendo en cuenta que el Upload filter generó polémica y sirvió a las plataformas de Internet de argumento de que toda la ley era una suerte de gran censura a Internet.

La propuesta se orienta en una ley que rige en Alemania desde 2013 y apunta a que plataformas, y buscadores como Google, paguen por los snippets.

Si llega a ser aprobada la ley el miércoles, el Parlamento, la Comisión Europea y el Consejo Europeo se juntarán para ponerse de acuerdo con la reglamentación para que se efectivice en dos a tres años.

Döpfner, CEO de la editorial Axel Springer y presidente de la Asociación de Editores de Alemania, optimista de que saldrá un derecho de autor ampliado para las editoriales.