Antonio Caño, director del diario El País de España sacudió al mundo periodístico con la difusión de su carta a la redacción, el pasado 3 de marzo, en la que anunció la transformación integral del periódico, lo que implica la adaptación a las nuevas tecnologías y el abandono en el corto plazo de la edición impresa.

Caño fue muy directo sobre sus intenciones futuras para el periódico impreso, reconociendo que tiene los días contados: “Asumimos el compromiso de seguir publicando una edición impresa de El País de la mayor calidad durante todo el tiempo que sea posible. Pero nos adentramos a la vez en la construcción de un gran medio digital de cobertura global que pueda responder a las demandas de los nuevos y futuros lectores”

Adepa consultó a un grupo de editores sobre el anuncio de Caño y sobre la tendencia del mobile first. A continuación las respuestas de Úrsula Ures Poreda, de Perfil.com; Abel Escudero Zadrayec, de LaNueva.com y Federico Turpe, de La Gaceta.

 

¿Qué opinión tiene de los anuncios de Antonio Caño en relación al proceso de transformación de El País de España?

Úrsula Ures Poreda: El País es, desde hace décadas, una referencia de peso para medios de todo el mundo. Tal vez, su determinación de incursionar desde papel a digital sin abandonar el primer formato sea una alternativa válida ante las formas de convergencia ensayadas por otros medios de igual o menor talla. El paso que ha dado es enorme y su forma de anunciarlo nos hace pensar en cuántos otros medios impresos intentarán repetir esa experiencia.

Si pretendemos forjarnos algún futuro, estamos obligados a pensar desde ahora con flexibilidad en torno a la incorporación de herramientas tecnológicas de todo tipo, sin que ello signifique una afrenta a los estándares y valores con los cuales ejercemos nuestro trabajo.

Rescato la impresión de Caño («El paso del papel a lo digital es solo uno y no el más grande de los muchos pasos que los periódicos tendremos que dar hasta alcanzar nuestro verdadero espacio futuro.») respecto a que este es sólo uno de tantos pasos que el periodismo deberá dar para asegurarse espacio.

 

Abel Escudero Zadrayec: Lo que El País acaba de anunciar es OTRA reconfiguración, como ya tantos han hecho en este ecosistema resbaladizo. Pero no incluye ningunear su versión en papel, sino enderezar decisivamente sus mayores esfuerzos y varios recursos hacia el desarrollo y la consolidación de su propuesta digital. Es la tendencia, y por supuesto en espíritu coincido. Se supone que casi todos vamos en ese sentido, a veces tambaleando e incluso rompiéndonos los dientes contra el piso, en busca (o a la espera, en el peor de los casos…) de aquel modelo sustentable que nos siga dando de comer.

 

Federico Turpe: Pienso que el anuncio de El País es un 80% marketing editorial y un 20% real. Es una empresa quebrada que hasta ahora ha fracasado en todas sus innovaciones y no está en condiciones de marcarle el rumbo a ningún medio. No es rentable en su plataforma digital y ya ha tenido que volver atrás cuando implementó el paywall. No creo que ningún editor medianamente informado siga ciegamente las decisiones de El País de España.

De todos modos insisto, creo que es más humo que otra cosa.

Hoy se habla de la tendencia del “mobile first”, lo que implicaría que los sitios web quedarían en un segundo plano. ¿Cuál es su visión al respecto?

Úrsula Ures Poreda: Los medios -en particular los digitales, por su propio origen- deben dejar de ser determinados en función de las plataformas para ser concebidos y desarrollados bajo un concepto de marca, y esto incluye la capacidad de trascender formatos y soportes tecnológicos. Parte del futuro de los medios está en la comunicación surgida del mundo mobile. Desconocer ese espacio equivale a autoimponer límites a un negocio que hoy está obligado a ser expansivo.

Eso no quiere decir que haya que abandonar la web y pasar a mobile. Se trata de incorporar lo mobile a las formas periodísticas tradicionales, no de abandonarlas para correr detrás de «lo nuevo».

Parte de los lectores digitales llegan a los medios periodísticos a través de dispositivos móviles pero la mayoría de la audiencia sigue buscando la «home» y versiones de escritorio. Hay toda una generación de consumidores de contenidos noticiosos que no puede ser ignorada y es, precisamente, aquella que oscila entre los formatos analógicos y sus versiones digitales. Ellos aún no migraron por completo hacia lo mobile y no pueden ser puestos a un lado en este análisis.

 

Abel Escudero Zadrayec: Son tiempos dramáticamente desafiantes e inciertos para la industria y no caben muchas sentencias: nadie sabe del todo nada. Creo esto: hay que poner lo móvil en el centro de la estrategia digital porque se trata de la plataforma más usada ahora…, aunque en realidad El Gran Problema de cada medio, hoy, es encontrar un modelo sustentable que pague por su periodismo. Se me ocurren otras cosas que deberían quedar en un segundo plano (o mejor, directamente, desaparecer): el ego, el miedo al fracaso y a lo nuevo, el llanto por el pasado, la paralización y la desconfianza por ignorancia… Podría seguir, pero me dicen que no hay tanto espacio. Y además, duele.

 

Federico Turpe: No creo que sea un «negocio» de los medios decidir estar o no en las plataformas móviles. Es donde está mayoritariamente hoy la gente y los medios no tienen otra opción que estar ahí. El problema es que si ya es complejo encontrar el «negocio» en el desktop mucho más lo será en el móvil, donde la publicidad casi no tiene espacio y el modelo de pago es casi inexistente en los móviles, salvo el micro pago (modelo Candy Crush).

Los editores están obligados a estar donde esté la gente y nunca deben abandonar ninguna plataforma mientras siga habiendo lectores allí. Ni web, ni papel, ni móvil. Hay que estar en todos lados donde aún haya público.