El apetito por medios locales ingeniosos existe. El desafío es encontrar cómo hacerlos rentables.

Con la polarización de los medios estadounidenses y la política que llegó a un pico de fiebre, muchos consumidores de medios – “cansados por la neblina de noticias políticas”, como postuló un artículo reciente de The New York Times – están respondiendo desconectándose.

La desconfianza en los medios, que se ha intensificado de forma global en los últimos años, también es un factor. Una encuesta reciente de Gallup encontró que solo el 13% de los estadounidenses confía en los medios “mucho”, mientras que el 28% indicó que confiaba en los medios “lo justo”.

Sin embargo, la evidencia sugiere una situación más favorable para los medios locales.

La encuesta Media Trust que Poynter hizo en 2018 y un estudio reciente de Knight Foundation y Gallup encontraron que la confianza en los medios locales es más alta que los medios nacionales.

Solo el 31% de los estadounidense dice que ellos confían en lo que informan los medios nacionales “mucho” o “bastante”, mientras que el 45% dice lo mismo sobre lo que informan los medios locales.

El cuarenta y cinco por ciento aún no es un gran número; claramente, todavía hay mucho trabajo para hacer. Estos esfuerzos se complican por que muchas redacciones tienen problemas financieros.

A pesar de este escenario, yo soy optimista. He pasado dos décadas investigando y trabajando sobre medios locales. Creo que ellos están en una posición para atender de una forma creativa a las audiencias que están cansadas por el drama de circunvalación.

Aquí hay cuatro maneras en que los medios locales pueden forjar una relación más profunda con las comunidades a las que sirven.

 

1. Interactuar con los lectores

Con la caída del 25% del empleo en las redacciones desde 2008 – el equivalente a 28.000 trabajos – hay menos personas en el campo. Sin embargo, las oportunidades para relacionarse con las audiencias son más grandes que nunca. 

Una manera de ser visible tanto en línea como en la vida real.

Los periodistas pueden pensar en oportunidades para mantener una interacción cara a cara con los lectores. Algunos medios empezaron a llevar a cabo reuniones editoriales abiertas, en donde los periodistas abordan las historias que hicieron, o realizaron meet-and-greets con el público. También hay oportunidades para captar a los lectores por las redes sociales, sea por Facebook Live o contestando preguntas en Reddit, también conocido como “Pregúntame lo que sea”.

Estos esfuerzos importan por que los periodistas locales son normalmente los únicos periodistas que las personas podrían conocer. Como resultado, pueden servir como un representante de percepciones de una industria más amplia.

 

2. Enseña el proceso

Otra manera para construir la confianza es explicando cómo funciona el periodismo.

Los investigadores sugieren que las audiencias no entienden cómo los trabajos periodísticos son producidos, y tampoco entienden algunos términos que usan los reporteros. 

Por ejemplo, una encuesta de 2018 encontró que el 60% de los encuestados creían que los reporteros recibían plata de sus fuentes “a veces o muy seguido”. Joy Mayer, directora del proyecto Trusting News (Confiando en los medios), me dijo que cuando los periodistas hablan de “fuentes anónimas”, mucha gente asume que el periodista tampoco sabe quién es la fuente.

No es difícil abordar esto, y al hacerlo pude ayudar a generar más confianza en la práctica periodística.

En diciembre de 2018, por ejemplo, los periodistas de The Oregonian publicaron una serie de cinco crímenes aparentemente diferentes y sus conexiones con John Ackroyd, un asesino convicto. Pero ellos no solo publicaron las piezas y esperaron ser premiados. También compartieron artículos sobre la esquematización de los métodos periodísticos, junto a una versión de toda la serie con anotaciones y links con documentos relacionados.

 

3. Dale a los lectores lo que quieren

Sin este tipo de transparencia, como reconoció un reporte reciente de Knight Foundation, la confianza en medios locales “es vulnerable a las mismas percepciones de tendencias partidarias que amenazan la confianza en los medios nacionales”.

Otra manera para intentar eliminar esto es cediendo algo de control a las audiencias.

En un artículo publicado por Nieman Lab, de Harvard, la consultora de redacciones Jennifer Brandel y la editora Mónica Guzmán argumentaron que es importante que los periodistas cambien su método de cobertura.

Las reuniones editoriales del futuro, escriben ellas, “no empezaran con nuestras ideas. Empezaremos con las lagunas de información que el público demuestra que tiene, y enfocando nuestros esfuerzos para llenar esos espacios plenamente”.

Haciendo que las audiencias manden sus preguntas y escuchando sus necesidades puede resultar en historias que los periodistas que no habrían producido de otra forma.

Un estudio reciente de The Knight Foundation resalta las oportunidades para poner este principio en marcha. Cerca de dos tercios de los encuestados quieren más cobertura de temas como la adicción a las drogas, educación tecnológica, el medio ambiente y trabajos públicos planificados. Ellos también quieren que los medios locales hagan un mejor trabajo en hacer rendir cuentas a aquellos en el poder.

 

4. Alenta a los lectores a pagar

Sin embargo, la inseguridad financiera de muchas redacciones es un gran obstáculo para la experimentación y para darle a los lectores el contenido que desean.

La caída de ingresos ha significado que  1 de cada 5, o 1.800, diarios locales han cerrado desde 2004. Hoy, más de 1.300 comunidades carecen de información local original.

La mayoría de los lectores simplemente no se dan cuenta de cuán grave es la situación para algunos medios.

De acuerdo con el Pew Research Center, el 71% de los estadounidenses “piensan que a sus medios locales les va bien financieramente”. Esto explica por qué solo el 14% de ellos apoyan económicamente a un medio local en el último año. 

Sin embargo, los lectores indicaron que ellos “son más proclives a suscribirse o a apoyar a su diario local si es el único de su zona y está en riesgo de cerrar”.

Un nuevo estudio muestra que las audiencias valoran a los medios locales, y el 61% de los estadounidenses dice que sus medios locales hacen un “excelente” o un “buen” trabajo cubriendo  lo que ocurre en su zona. Pero el último reporte de Knight Foundation, “Putting a Price Tag on Local News” (Poniendo un precio a las noticias locales), también encontró que pocos lectores están actualmente pagando por ellos.

Claramente, muchos lectores no se dan cuenta qué tan precarias están las cosas. Las redacciones entonces deben plantear mejor su caso sobre el valor de su trabajo y por qué necesitan ser apoyados.

 

Un imperativo cívico

Hasta entonces, los medios locales deberán hacer más con menos.

Esto no es fácil. Pero incluso las redacciones más chicas, como la Cottage Grove Sentinel de Oregon, han sido capaces de experimentar exitosamente con nuevos formatos y maneras de captar a los lectores.

Los estadounidenses creen que los medios locales son precisos, útiles, confiables y atentos. A pesar de todo, sin una industria vibrante de noticias, menos personas se postularán a elecciones y los ciudadanos se volverán menos comprometidos con las elecciones.

“La disminución de los medios locales es para la democracia lo que el cambio climático es para el medio ambiente”, argumenta Tim Franklin, el director de Medill Local News Initiative de la Universidad Northewestern. “Es una crisis lenta, donde recién ahora estamos viendo sus efectos”.

El apetito por medios locales contundentes y relevantes claramente está. La gran pregunta es cuál es la mejor manera para enfrentarlo y satisfacerlo – todo mientras asegure que los periodistas locales puedan pagar las cuentas.

 

Por Daniel Radcliffe

 

Fuente: What´s new in publishing