Los tres medios tradicionales más importantes de Corrientes, El Libertador, El Litoral y Época, se pusieron de acuerdo a comienzos de año, para combinar sus esfuerzos y asegurar que los ciudadanos de la provincia cuenten todos los días al menos con uno de los diarios locales en versión impresa.
La decisión fue consensuada por las empresas que integran la Cámara de Editores y Medios Gráficos de Corrientes, que se repartieron las salidas de las ediciones impresas. “La idea surgió de una reunión entre los tres gerentes generales, y luego se trasladó a los dueños”, explicó Juan Carlos Fernández Llanos, que ocupa ese cargo en El Libertador.
El acuerdo implica que de lunes a sábado se edita en forma impresa uno solo de los títulos, y los domingos salen los tres juntos. “Hay buena relación entre las tres empresas, así que no fue difícil. De esa manera nos ahorramos mucha inversión en insumos y se satisface la demanda de los lectores todos los días”.
La distribución de la edición impresa quedó de la siguiente manera: los lunes y los martes se distribuye solamente El Libertador; los miércoles y los jueves se edita Época, y los viernes y los sábado, El Litoral. Mientras que el domingo los tres medios impresos están en las calles.
La nueva estrategia compartida por las empresas se comenzó a implementar a partir del 8 de enero, y según comentó Fernández Llanos “fue muy funcional el día que cada uno está solo en la calle porque se vende el doble, y casi el triple”. Además destacó que “los lectores apoyaron la medida ya que empezaron a comprar los otros diarios que antes no compraban por ser el único que está en la calle cada día”.
La medida fue una respuesta de los editores correntinos a la crisis que atraviesa la industria gráfica, que se viene agudizando en los últimos tiempos, y que tuvo efectos en todo el país, con la discontinuidad de ediciones impresas y algunos cierres de medios.
Los nuevos públicos, los diferentes intereses de los lectores, las múltiples plataformas de presentación, entre otros factores, llevaron a un reacomodamiento operativo que se traducirá en una preminencia del contenido virtual -web y redes sociales- pero asegurando la continuidad de la versión papel de manera tal que cada una de las empresas marque la semana con sus propuestas periodísticas.
“Hay que ver innovadores paras seguir desarrollando nuestra actividad, que es fundamental para la democracia”, dijo Fernández Llano. Entre las razones, explicó el directivo, estuvo la disminución de la venta del diario de papel como efecto de la post pandemia, más los desmedidos aumentos en el costo en los insumos (papel, chapas y tinta), todos atados al dólar. “Hay una necesidad de adaptarse, reinventarse. Por ahora los efectos son positivos”, señaló el directivo de El Libertador.