La Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA) condena las graves amenazas de Pablo Otero, titular de la tabacalera Sarandí, contra el periodista Nicolás Diana, de Clarín, luego de un artículo referido a un caso de evasión que involucraría a su compañía. Lo hizo a través de un mensaje dirigido a la casilla de correo del periodista, y luego lo replicó en su cuenta en la red social X, donde acusó al medio de poner en marcha «una cacería» en su contra.
La maniobra de evasión difundida por el medio fue detectada por la ex AFIP, ahora llamada ARCA, que observó que entre los meses de octubre y diciembre de 2024, Tabacalera Sarandí «distorsionó» la información que debió entregarle al organismo sobre la cantidad de estampillas que recibió y utilizó para adherir en cada paquete de cigarrillos. Esas estampillas constituyen instrumentos de control y trazabilidad que utiliza ARCA para poder cobrar los impuestos de cada atado que se vende.
No es la primera vez que Otero amenaza o aprieta a medios y periodistas. En mayo del año pasado ya había enviado correos electrónicos a varios periodistas luego de que publicarán una maniobra similar con una supuesta falsificación de estampillas. También llevó adelante demandas personales contra esos medios y sus periodistas.
A raíz de ello, en agosto del año pasado, ADEPA se manifestó alertando por la creciente utilización de reclamos judiciales como mecanismo de censura indirecta. Se mencionó en tal sentido la demanda de Otero contra Andrés Sanguinetti y los directivos del medio iProfesional, por haber realizado una nota en la cual se indicaba que una tabacalera, de propiedad de aquel empresario, maneja el 45% del mercado local de cigarrillos y está denunciada por no pagar impuestos que rigen a la industria, además de tener otras causas por contrabando y lavado de activos. Reclamos similares, por ahora extrajudiciales, se hicieron también a los periodistas Marcelo Longobardi, Camila Dolajbian, Diego Cabot, Alejandro Alfie, entre otros.