En la reciente Jornada de Capacitación realizada en Mar del Plata y organizada por Adepa y la Secretaría de Medios de la Provincia de Buenos Aires, Franco Piccato, secretario de Redacción de La Voz del Interior, explicó que una redacción es una organización hecha de gente y de cultura, que debe tener objetivos claros y producir resultados, al tiempo que destacó que “si las personas no se sienten protagonistas del cambio, la organización no cambiará.”
También definió al cambio como “un proceso evolutivo”, y especificó el trabajo que deben hacer los líderes para guiar a las personas y enfatizó en la importancia de las métricas, que son indicadores para saber dónde se posiciona la organización y el equipo.
A partir de su propia experiencia en la transformación del diario La Voz del Interior en los últimos años, Piccato primero planteó algunos puntos importantes para unir la misión social con los objetivos del negocio a través del cambio que necesita una redacción para que estos se vuelvan en acciones efectivas y resultados positivos.
Para Piccato, es clave que los directivos trabajen sobre la motivación de la gente. “Entender la gestión del cambio en una redacción es entender que es un proceso evolutivo, que hay que planificarlo. El cambio tiene que expresarlo explícitamente desde arriba hacia abajo, porque si la gente quiere cambiar pero sus directivos no, la organización no cambia”, explicó el secretario de redacción de La Voz del Interior. Es por eso que considera que una redacción es un conjunto de personas y de cultura, una organización que hay que diseñar. Si alguna de las dos no funciona, la empresa no podrá llegar a sus objetivos
Para diseñar y planear el plan de cambio, Piccato se basó en las recomendaciones de Ray Dalio, en el libro Principios en 2017 para orientar el trabajo de los líderes en las organizaciones y empresas. Estableció una forma para mejorar el trabajo de un grupo de forma evolutiva, es decir que vaya mejorando aún más en el tiempo. Para él, según la propuesta de Dalio, un líder debe:
1. Establecer objetivos claros de la organización.
2. Identificar los problemas (y no tolerarlos).
3. Diagnosticar qué partes no funcionan bien.
4. Diseñar los cambios.
5. Hacer lo que hay que hacer.
Para llevar a cabo los objetivos de la empresa, considera que el líder tiene un rol muy importante porque define la cultura de la redacción, ya que cumple la función de modelo de su equipo. “Los líderes son como un espejo, obtienen lo que generan”, aseguró Piccato. Es por eso que recomienda explicitar los organigramas y la estructura, para dejar en claro el mapa de reportes de la redacción. De esta forma, cada persona puede entender a quién responde y cuál es su trabajo. Para todo eso hay que seleccionar a los mejores líderes y los mejores talentos que puedan dirigir a la redacción a buenos resultados. No se trata sólo de un cambio generacional para asegurar la transformación de la redacción, es necesario complementar veteranía y juventud. A partir de todos estos puntos, se puede definir una cultura de la redacción y desarrollarla.
Para poder evaluar cuáles son los cambios que se deben llevar a cabo y sus resultados, Piccato propone algunas métricas que permitieron diagnosticar y evaluar la situación de la redacción. Estas mismas son las que La Voz de Interior tiene en cuenta desde el 2015. Estos permiten conocer en dónde están parados y en qué hay que mejorar porque “lo que no se mide no se conoce”:
1. Calidad del producto: miden su Agenda Propia y Reenfocada (la cantidad de noticias producidas por el medio que no son commodity), la cantidad de fuentes en cada una de las notas, el género de esas fuentes, y la corrección de las páginas completas en la edición impresa.
2. Producción Digital: tomar en cuenta la cantidad de notas para la web que hace cada periodista de la redacción. Desde un principio buscaban que cada uno haga una nota por día para la versión digital del diario, y en los últimos años aumentaron la productividad a casi 3 notas por periodista en un grupo importante de la redacción.
3. Suscripciones: cuentan la cantidad de notas premium por sección, a las que que sólo pueden acceder los suscriptores, y el porcentaje de conversiones desde el premium, es decir, la cantidad de suscripciones generadas a partir de notas exclusivas.
4. Performance de contenido (CPI): estudian cómo funcionan las notas que publican después de cada clic. A partir de eso, determinan su alcance y la fidelidad que genera en los usuarios. Para determinar esto, observan cuáles son las notas que ellos leen, la profundidad de lectura que alcanzan, y el tiempo de atención que ponen en cada una.
5. Audiencia móvil: estudian la cantidad de usuarios únicos y las páginas vistas. Además, toman en cuenta la duración de sesión y tiempo de permanencia, y las nuevas adquisiciones por canales sociales y search.
6. Audiovisual: se enfocan en la cantidad de videos que publican, su productividad al generar videos propios, las reproducciones de cada uno, y el tiempo medio por reproducción para ver si vale la pena o no poner una publicidad ahí.
7. Monetización: evalúan la cantidad de suplementos monetizables y de videocontent con sponsor que genera la redacción.
8. Gestión de personas: La Voz lleva adelante un proceso de evaluación del desempeño dos veces al año. Se trata de instancias formales de conversación entre los jefes y sus colaboradores para establecer objetivos de mejora y su seguimiento. También se realizan encuestas de clima. También toman en cuenta las capacitaciones realizadas para sus trabajadores.
9. Innovación: intentan realizar proyectos especiales, hackatones y alianzas con terceros.
Para poder obtener resultados distintos, Piccato cree que es necesario cambiar el modelo de gestión. Para conocer el avance de los cambios, deben tomar métricas para conocer el estado de cada proceso. A partir de los datos que se relevan, se deben tomar decisiones y motivar al equipo de trabajo.
Por último, él recomienda crear “relaciones significativas” dentro de los equipos, en un ambiente de transparencia y de confianza para asegurar que los resultados sean efectivos. Esto permite afianzar el compromiso de la gente con el liderazgo de la agenda periodística, y el aumento del impacto y de la influencia de las marcas periodísticas.
