El presidente de la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (Adepa), Guillermo Ignacio, se refirió a la trascendencia local e internacional de la firma de la Declaración de Chapultepec por parte de Mauricio Macri, tras el acto realizado en la Casa Rosada.
“Para Adepa no es una novedad este compromiso del presidente argentino con las libertades de prensa y de expresión. Ya en marzo del año pasado, en plena campaña electoral, nos adelantó su visión en una cena organizada por Adepa en el marco de su Junta de Directores. Y el 15 de diciembre pasado, apenas cinco días después de asumir la presidencia, en nuestra cena aniversario y ante 300 invitados, reiteró ese compromiso y destacó especialmente la lucha de nuestra asociación por ´la valentía con la que defendieron nuestras libertades y la búsqueda de la verdad en los últimos años´”, expresó Ignacio.
El presidente de Adepa rememoró así los antecedentes inmediatos de Macri en relación a los principios expresados por la Declaración de Chapultepec, que data de 1994.
Por la noche, en la comida mensual de camaradería de Adepa realizada en un hotel céntrico, en la que participaron los integrantes de la delegación de la SIP que viajaron a Buenos Aires a presenciar la firma de Macri y representantes de medios de todo el país, el presidente de Adepa señaló que si bien han existido limitaciones, presiones y vulneraciones al ejercicio de la libertad de prensa, ésta nunca dejó de regir desde 1983 a la fecha. “Pero no fue por decisión o concesión de los gobernantes que tuvimos desde el retorno a la democracia –explicó-, sino por la firme voluntad de los editores que la ejercieron con plenitud, y que decidieron que en la Argentina iba a seguir funcionando la libertad de prensa pese a las consecuencias que debían afrontar”.
En su discurso, Ignacio también se refirió a los diversos mecanismos de censura que implementó el kichnerismo para presionar a medios y editores, o para coptarlos. “Hubo presiones directas nunca desmentidas, como por ejemplo las impulsadas por el exsecretario de Comercio Guillermo Moreno, quien impuso a supermercadistas y retailers la no publicación de avisos en determinados medios, para provocarles una asfixia económica”, relató. “Y hubo también -agregó- otra forma de censura, menos difundida, y que se derivó del gran incremento de los montos de pauta publicitaria. Lo que ocurrió fue que hubo quienes se sintieron seducidos por esa montaña de dinero, bajo de la cual quedaba sepultada la voluntad editorial del medio”.