Horas, minutos y segundos son probablemente tres palabras muy preciadas para el hombre. Jóvenes y adultos se quejan de que “no tienen tiempo” y pocas veces hacen algo para revertir su situación.
Martina Rúa y Pablo Martín Fernández, ambos periodistas, leyeron, investigaron y experimentaron una serie de técnicas y metodologías que derivaron en La fábrica de tiempo, un libro que ayuda a optimizar las horas no sólo para el trabajo, sino que también para disfrutar de un hobby, un momento con la familia, los amigos o la pareja.
En entrevista con Adepa, los autores del libro que no tiene un orden de lectura –se puede elegir un capítulo al azar- contaron cómo fue el proceso de escritura, qué aspectos de su profesión les sirvieron para producirlo y con qué se encuentra el lector que decide adoptarlo.
¿Cuál fue el punto de partida para escribir el libro?
Pablo Fernández: Los dos veníamos escribiendo y charlando hace mucho sobre temas relacionados con el manejo del tiempo, la productividad y temas cercanos. Vimos que necesitábamos escribirlo y nos dimos cuenta de que no había nada escrito o no encontramos nada de la manera en que queríamos escribirlo, como si fuésemos pares.
La idea es que alguien que lea el libro sienta que se lo está contando un par, alguien que por default no es ordenado, sino que probó un montón de técnicas y se las cuenta. El otro eje que nos gustaba a los dos es que no necesariamente [el libro] es para trabajar, sino que es también para tener un hobby, para pasar más tiempo con tu familia, con tus amigos, con tu pareja. En muchos casos está bastante enfocado en trabajar más y en realidad nosotros queremos que trabajes más ordenado o mejor.
¿Cómo describiría la experiencia de producir un libro en equipo?
P.F.: Fue una experiencia genial, en gran parte porque nos conocíamos de antes. Fue en sí una experiencia del manejo del tiempo de ver cómo hacíamos para mezclarlo con todo lo que hacemos en el día a día sin afectar a terceros. Entonces nos organizamos bastante bien, con mucho trabajo a distancia y nos juntábamos cada tanto a coordinar en persona.
¿Qué aspectos de su profesión les dieron las herramientas para escribirlo?
P.F.: Seguro tiene que ver con la escritura que para nosotros nos es natural, o sea que esa barrera no la teníamos. Después había que ordenarse, ordenar conceptos, hacer que los capítulos tengan sentido y estén hilados.
Martina Rúa: Nuestra manera de ejercer la profesión, que tiene que ver con trabajar en muchos lugares a la vez, en distintos proyectos -algunos por hobby y otros porque tenemos que hacerlo- nos impulsó a buscar técnicas para trabajar de una manera cada vez más eficiente. Cualquier persona que quiera hacer muchas cosas, porque realmente sienta que no le alcanza el tiempo como nosotros sentimos, va a encontrar en este libro un montón de herramientas que tienen que ver con la principales herramientas, métodos y técnicas que se están usando a nivel global para el manejo del tiempo. Nuestra propuesta es, no sólo ceñirnos al manejo del tiempo, sino buscar una manera de vivir más equilibrada y eso es algo que necesitamos muchísimo en nuestra profesión y en nuestra manera de ejercerla.
¿Con qué se encuentra quien decide leerlo?
P.F.: El lector se encuentra un poco con lo que decía al principio. Creemos dos cosas. Que el libro se puede leer salteado -es una caja de herramientas podés empezar por el capítulo tres si lo que necesitas es eso, podes empezar por el ocho, por el cinco, no hay problema- y está hecho a propósito, por diseño, se va a encontrar con ejercicios, herramientas prácticas, con que todo está respaldado por estudios, papers que están citados.
Y después, son herramientas, consejos, pero todo escrito por un par, por alguien que pasó por eso y que se dedicó a filtrar lo que considera más relevante de todas las herramientas que probo. Se va a encontrar con una síntesis de un montón de contenidos filtrados por un par, por alguien que lo escribe acá en la Argentina para un público que sabe cómo vive y cómo corre en el día a día.
M.R.: Alguien que vaya a meterse en La fábrica de tiempo va a encontrar consejos muy cercanos. Consejos de un par que sabe que todos buscamos trabajar mejor, que sabe desde la trinchera, no desde el lado del gurú, sino desde el lado del que la está peleando, la necesidad que tenemos en estos tiempos de tener foco, de tener tiempo de descanso, de no dejar todo para último momento. Entonces la búsqueda es eso, trabajar cada vez mejor para vivir de una manera más equilibrada. Y lo hacemos a través de ejercicios y de ejemplos y de papers que se pueden seguir investigando por afuera del libro. La fábrica de tiempo es una caja de herramientas para empezar a ir hacia una vida más productiva.
¿Cómo convencerían a la audiencia de leer el libro?
P.F.: Desde el punto de vista de que el libro se llama La fábrica de tiempo, creemos que si pasas una hora leyéndolo vas a multiplicar tu tiempo mucho más que esa hora. Vas a tener diez horas, veinte horas, treinta horas, vas a ganar muchas horas gracias a las herramientas que están en esa horita que le dedicaste. Si lo terminás de leer nosotros creemos que van a ser días o meses que vas a ganar. Porque nos pasó a nosotros que no somos ordenados y que nos vamos ordenando con el tiempo, entonces creemos que así va a ser. Ese es el principal motivo.
Y otro es que está escrito de una manera llana y a su vez basada en la información y en data concreta, entonces creemos que es un buen equilibrio y que le puede servir a todos. Este no es un libro de management, es un libro que le puede servir a cualquier persona o trabajador que tiene problemas para organizar su tiempo.
M.R: Le diría que nueve de cada diez personas en el mundo demoramos las cosas que tenemos que hacer hasta último momento y esto deteriora el tiempo, hace realmente que no podamos tener más momentos de ocio y más momentos de descanso y que el tiempo con los que más queremos no sea de calidad.
La promesa es que van a encontrar en esta “fábrica de tiempo” ejercicios muy simples con los que se puede activar de manera paulatina un cambio de hábito para trabajar de una manera más eficiente y no dejar que nos gane la fiaca y que nos gane ese último momento que hace que no vivamos como queremos. La fábrica de tiempo busca sobre todo que vos elijas para qué usas el tiempo. Esa es la promesa y con eso los quiero convencer.