En el marco de la Reunión de Medio Año de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), el presidente de ADEPA, Martín Etchevers, fue el moderador de una charla titulada “La necesidad de crear una red social de interés público”.
Catalina Botero, abogada especialista en derecho constitucional y ex-integrante del Consejo de Supervisión de Meta, fue quien realizó esta exposición y desarrolló su tesis sobre el rol de las plataformas digitales en la era de la desinformación.
A modo de introducción, Etchevers comenzó diciendo que la “mayor preocupación de los medios y la industria periodística es la proliferación de desinformación y creación de burbujas a través de los algoritmos”.
“Esto se profundiza cuando hay gobiernos que se apalancan en esta lógica para fortalecerse políticamente”, explicó al hablar del contexto político global.
Así fue como le dio el pie a Botero, quien realizó una reflexión sobre el panorama actual: “Creo que en democracias frágiles, las nuevas formas de comunicación política —que en algún momento representaron una esperanza de mayor pluralismo— son una enorme amenaza”.
El por qué de la era de la desinformación
Ante esta problemática, la abogada colombiana planteó 3 razones que explican el por qué de esta situación. “En primer lugar, estamos en manos de gigantes tecnológicos difíciles de controlar, ya que toman las decisiones que quieren y sin supervisión alguna. Hay un enorme poder de las plataformas que es muy poco transparente y sirve a intereses alejados de los valores democráticos”, comentó.
En segundo lugar, se refirió a las campañas de desinformación que proliferan en las redes sociales: “Hay campañas y estrategias de desinformación que se sirven de la tecnología y las máquinas, donde es muy difícil discernir si un contenido es generado por una máquina o una persona”. Además, aclaró que la microsegmentación también es una forma de desinformación y desarrolló la tercera razón: las cámaras de eco.
“Hoy en día no solamente se puede llegar directamente al interés del usuario sino que también se puede lograr que llegue a fanatizarse a niveles en los cuales convencer al resto sea lo único que haga en el día”, dijo la miembro del panel de transparencia externa del Banco Interamericano de Desarrollo. Además, enfatizó la importancia del rol del periodismo en este contexto: “El antídoto es la prensa seria, profesional, que investiga, que le interesa la preservación del bien común”.
Las plataformas y la toma de decisiones “editoriales”
Otro de los temas desarrollados en esta exposición tuvo que ver con el rol de “editor” que ahora tienen los dueños de las plataformas al inundar con contenidos propios los algoritmos de la audiencia. Para explicar esto, Catalina Botero desarrolló las tres etapas de evolución de las redes sociales, siendo la tercera en la que se encuentran hoy:
La primera etapa es la creación de la red social: el funcionamiento, el objetivo y el análisis del impacto que pueden llegar a tener en la sociedad. La segunda etapa es aquella en la cual se “advierten los problemas de los algoritmos y (las plataformas de redes) comienzan a recibir críticas que las llevan a fortalecer sus sistemas de seguridad y confianza para que los algoritmos no sean muy nocivos”. La tercera y última etapa es la actual: perdieron los escrúpulos, cumplen un rol de editor y ya no hay dudas que se les puede atribuir responsabilidad. “Toman decisiones clarísimas sobre qué contenido quieren que se amplifique y cuál se disminuya, ensombrecen los contenidos”, sentenció.
Además, Botero explicó cómo fue su trabajo en el Consejo de Supervisión de Meta y cuáles fueron sus logros. “Nosotros pudimos hacer algo conociendo casos particulares y dando recomendaciones generales para aplicar. Un ejemplo es la aplicación de reglas de moderación de contenido, donde buscamos que aumente el número de moderadores y la transparencia”, explicó.
No obstante, aclaró que “hoy ese consejo no tiene la potestad para tomar decisiones porque hoy Meta está guiado por los intereses de Donald Trump”.
Cómo regular las plataformas sin limitar la libertad de expresión
Otro de los ejes fundamentales de la charla estuvo en la hipotética regulación de las plataformas digitales y la importancia de que eso no resulte en una limitación a la libertad de expresión y de prensa. “Creo que es urgente regular pero con cuidado y prudencia”, comenzó diciendo Catalina Botero. “Hay muchas cosas que se pueden hacer, como por ejemplo establecer leyes antimonopolio y empezar a pensar en sistemas interoperables”, comentó. Respecto a los sistemas interoperables, explicó que es fundamental incorporar una “autoridad independiente que supervise que lo que hacen las plataformas se condice con lo que dicen que están haciendo”.
“Hay que obligar a las plataformas a trabajar con mayor transparencia, a hacer un análisis sobre los efectos que tienen sus algoritmos en las audiencias y deben estar obligadas a identificar las campañas de desinformación”, recomendó.
Los obstáculos para la creación de una red integral de interés público
Botero propone crear una red social de interés público: “Los algoritmos serían públicos, se sabría cómo se administra la web y cómo se publica el contenido”, dando una mayor transparencia. A su vez, comentó que navegar por esa red no costaría plata y que las ganancias de la publicidad irían directamente a quien generó el contenido.
Para concluir la charla, el presidente de ADEPA le consultó a la abogada cómo se haría para que la red integral que propone Botero pudiera competir con las redes (como X, Instagram, Tik Tok, etc) que “utilizan las lógicas más primitivas del ser humano”. Su respuesta fue clara: “es una competencia muy difícil pero hay que hacer el esfuerzo ya que una red de interés público no deja de ser apasionada”.
Además, concluyó que “es importante controlar a los gobiernos, que tengan que ofrecer información fidedigna y actualizada”.